Algo se está cociendo mal en el Partido Popular
Mucho me temo que muchos de los dirigentes del Partido Popular nacional no han sabido afrontar con criterio de crecimiento político la derrota electoral de las pasadas elecciones generales. Mucho me temo que la enorme madeja de confusión que están creando terminará por sumir a esta formación política en una crisis interna sin precedentes.
Mikel N. Navarro
Siempre he dicho que en política solo se puede crecer sumando y no restando. Los últimos acontecimientos en el seno del Partido Popular están cobrando una dimensión de tal calibre que las consecuencias están empezando a ser muy preocupantes. Tanto es así que los medios de comunicación afines al psoe se frotan cada día las manos con este culebrón por entregas que vienen realizando desde Génova, mientras que los medios afines al pp avivan la llama de la discordia con planteamientos de peso pero no por ello más reconciliadores.
foto: Alberto di Lolli
El último capítulo en esta desidia pepera que solo baneficia al adversario político, ha sido la entrada en la batalla de José María Aznar, quien se siente muy disgustado por los acontecimientos desde su tranquila atalaya de FAES. Pero además de las salidas de San Gil y Ortega Lara, la crisis interna se ha disparado de tal forma que ha abandonado los despachos de la sede en Génova y ha salido a la calle en forma de SMS. Efectivamente la militancia, tan dividida como la cúpula, ha convocado vía mensaje de texto a sendas concentraciones a las puertas de la sede del Partido Popular, una en favor de San Gil y Ortega y otra en apoyo a Rajoy. Como decía Zapata "Que corra la sangre, Viva la revolución"
Mikel N. Navarro
Siempre he dicho que en política solo se puede crecer sumando y no restando. Los últimos acontecimientos en el seno del Partido Popular están cobrando una dimensión de tal calibre que las consecuencias están empezando a ser muy preocupantes. Tanto es así que los medios de comunicación afines al psoe se frotan cada día las manos con este culebrón por entregas que vienen realizando desde Génova, mientras que los medios afines al pp avivan la llama de la discordia con planteamientos de peso pero no por ello más reconciliadores.
foto: Alberto di Lolli
El último capítulo en esta desidia pepera que solo baneficia al adversario político, ha sido la entrada en la batalla de José María Aznar, quien se siente muy disgustado por los acontecimientos desde su tranquila atalaya de FAES. Pero además de las salidas de San Gil y Ortega Lara, la crisis interna se ha disparado de tal forma que ha abandonado los despachos de la sede en Génova y ha salido a la calle en forma de SMS. Efectivamente la militancia, tan dividida como la cúpula, ha convocado vía mensaje de texto a sendas concentraciones a las puertas de la sede del Partido Popular, una en favor de San Gil y Ortega y otra en apoyo a Rajoy. Como decía Zapata "Que corra la sangre, Viva la revolución"
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