NI ESCUDO DE TORRE DEL MAR NI LOGOTIPO DEL GRUPO INDEPENDIENTE

Dicen que Dios no se queda con nada de nadie y que al final la razón pone a cada cual en su sitio. La Junta le ha dicho al consistorio veleño que el escudo de Torre del Mar no podrá ser utilizado de forma oficial por la tenencia de alcaldía torreña. Y eso que el citado escudo sería el único que podría ser utilizado de forma legítima y no el logotipo del Grupo Independiente de Torre del Mar, ese que ha sido impuesto por Manuel Rincón los últimos años como escudo torreño y que sigue expuesto y utilizado en todas las disposiciones oficiales de la tenencia,  financiado con el dinero de todos los ciudadanos.

Mikel N. Navarro

Cuando las pretensiones de aquellos que se creen en posesión de la verdad absoluta, terminan por imponerse por encima de la ley y de la razón, no es de extrañar que terminen siendo presa de sus propias tropelías. Desde hace años venimos asistiendo en Torre del Mar a la imposición más descarada por parte de quienes, escudándose en un sentimiento noble y real,  los deseos de ser pueblo por parte de los torreños, sientan cátedra y hacen y deshacen a su antojo sin rendir cuentas ni a Dios ni al diablo. Y todo esto con el consentimiento tácito del alcalde de turno, más preocupado por mantener su estatus en la capital el reino que en pararle los pies al archi-líder del Grupo Independiente Promunicipio de Torre del Mar.

Y es que parece existir en esta corporación municipal cierto temor a las posibles salidas de tono del señor Rincón si se le lleva la contraria. Quizás a base de escuchar repetidas veces, una y otra vez, a lo largo de los años, que el único alcalde moral de Torre del Mar es Manuel Rincón, nos lo hayanos creído. Y ni esa afirmación es cierta, ni Torre del Mar ve ya en el señor Rincón, ni su mecenas, ni su salvador, ni mucho menos su alcalde. Creanme, conozco bien el paño y una menteria no deja de ser mentira por mucho que se nos imponga, disfrazada de verdad.

Se aproximan las elecciones y todo está por decidir, pero a menos que Manolo Rincón tenga en su poder la fórmula secreta de la cuadratura del círculo, lo tiene muy difícil para seguir vendiendo el manido y cansino argumento independentista que se derrumba como un castillo de naipes. Quién sabe, a lo mejor, con algo de suerte, logramos perdele de vista de la vida política local. Después de tantos años sería saludable, necesario, democrático y muy gratificante. Un poco de aire fresco para Torre del Mar.