CÓMPETA, DEL SERMÓN AL MITIN SÓLO HAY UN PASO

 El actual alcalde de Cómpeta por el Partido Popular, José Luis Torres, ha revalidado la mayoría absoluta que ya obtuvo en las pasadas elecciones y además ha conseguido aumentar el apoyo con 120 votos más. Hasta aquí la historia no difiere mucho de cualquier otro alcaldable, salvo porque José Luis Torres era el párroco de la localidad que decidió dar el salto a la política local, prácticamente por aclamación popular. 

Mikel N. Navarro

José Luis, el alcalde cura de cómpeta, como se le conoce popularmente en la comarca, es un hombre con una capacidad impresionante para la política. Convencido de que la religión se encuentra en el corazón de las personas y no en las rodillas, José Luis Torres decidió un buen día hacerles caso a sus feligreses y presentarse a alcalde de su pueblo por el Partido Popular (PP). No le debe haber ido muy mal en la gestión si tenemos en cuenta que acaba de revalidar su mayoría absoluta incrementado sus apoyos en más de cien sufragios.

José Luis Torres, alcalde de Cómpeta

No se crean que esto de haber hecho el sacerdocio, te garantiza el triunfo en política. Que se lo digan a Arturo García, que dejó los hábitos por la política para concurrir a las elecciones autonómicas en el Principado asturiano por la candidatura del Partido Democrático y Constitucional (PDyC) y apenas ha conseguido un millar de votos. García, de 39 años y abogado en ejercicio, fue suspendido de sus labores pastorales por el Arzobispado de Oviedo tras anunciar a sus feligreses que se presentaría a las elecciones al frente de un partido fundado por él mismo con el objetivo de que la sociedad recuperase "la confianza en la política". No se si habrá conseguido su objetivo pero a vista de los resultados sus vecinos más que la confianza en la política parecen haber perdido la fe en su sacerdote.

No es el caso de Cómpeta donde los vecinos no sólo no han perdido la fe en su cura Torres sino que además lo respalda de forma masiva como candidato a la alcaldía. Los mítines de campaña de José Luis Torres tienen fama de ser animados y muy populistas. Confieso, nunca mejor dicho, que me hubiera gustado asistir a algún sermón del candidato popular cuando ejercía de párroco en Cómpeta. ¿Quién dijo que había que separar iglesia y estado? Torres, debió reflexionar sobre aquella famosa frase de Juan Pablo II en la que afirmaba que ¡la Iglesia de hoy no necesita "cristianos a tiempo parcial", sino cristianos de una pieza! y decidió que si sus vecinos le pedían que se dedicara a la política a tiempo completo lo mejor era dejar los hábitos aparcados y cambiar el sermón de los domingos por el mitin de campaña y el púlpito por el atril del escenario político. Algunos pensaron entonces que no llegaría muy lejos con esta aventura y sin embargo, José Luis Torres, ya ha conseguido hoy dos mandatos con mayoría absoluta consecutivas. ¡Milagro!, que dirían las más beatas, pero la realidad es que, con ayuda divina o sin ella, las virtudes del alcalde de Cómpeta tienen más que ver con la condición humana que con la inspiración divina. Más con el esfuerzo personal que con la oración colectiva y más con la gestión económica que con el agua bendita;  y... que Dios me perdone.